Vaya por delante que ese circo y subdeporte que es la F1, donde los pilotos no pintan nada y los que deberían subir al podio deberían ser los ingenieros de cada equipo, nunca me ha interesado ni lo más mínimo. Es un coñazo aburrido.
Pero lo que me he podido reir hoy cuando McLaren ha hecho el ridículo por hacer todo lo posible -dentro y fuera de las normas- para que no ganase Alonso en favor de Hamilton, y que al final hayan perdido absolutamente todo en la última carrera de la temporada, eso no tiene precio.
Aupa Ferrari.
domingo, 21 de octubre de 2007
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1 comentario:
Yo creo que han sido las ganas de un montón de gente de que pasará algo así, que han provocado un vórtice de probabilidad y tal.
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